jueves, agosto 17, 2006


La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) federal, estará al pendiente de que la empresa de autobuses propietaria de la unidad que se volcó en el vado “Arroyo Seco” de la carretera federal que atraviesa por el municipio de Villa de Guadalupe, pague las indemnizaciones a los pasajeros accidentados y a los deudos de las quince personas fallecidas a consecuencia del percance. El director del Centro SCT, Enrique Carrillo Ortiz, dijo que la empresa deberá de absorber la irresponsabilidad de su chofer, al haber cruzado por el lugar en condiciones inadecuadas, ya que se confirmó que la tragedia se debió a una falla humana. De acuerdo a los reportes de la Policía Federal Preventiva y a las investigaciones realizadas por la SCT, había suficiente señalética preventiva para que se tomaran las precauciones necesarias. “La señalización informativa y restrictiva está clara, en la que se establece una velocidad máxima a 40 kilómetros por hora; se da a conocer que existe el vado en la zona y señales sucesivas de “no rebase, vado a 250 metros”, puntualizó. Ayer continuó la atención de las personas accidentadas, las cuales, de acuerdo a reportes médicos se encuentran fuera de peligro. La inmensa mayoría de los pasajeros que fueron hospitalizados fueron dados de alta entre el domingo y ayer y las que se quedaron internadas no presentan lesiones serias, por lo que se espera que se recuperen pronto. El vado en el cual se registró el accidente, regularmente desahoga el agua en lapsos de 20 a 30 minutos, pero el error del operador sería no esperar los tirantes del líquido, lo que provocó que la fuerza de la corriente empujara el autobús. Carrillo Ortiz dijo que no han tenido reportes de personas desaparecidas. Oficialmente se tuvo conocimiento de 16 personas fallecidas que viajaban en la unidad que iba con cupo lleno.